Sabemos lo que es la caries dental y porqué se produce?
“ yo me
cepillo todos los días y tengo la boca destrozada, es porque tengo tendencia,
el cepillado y las pastas dentales no hacen nada”
Parece que con esta frase, la gente de por sentado que haga
lo que haga va a seguir teniendo caries.
Y nada más lejos de la realidad. La caries es una enfermedad que
puede prevenirse .
Creo que la población
debería tener mayor información sobre la enfermedad, saber porque se produce y cómo puede prevenirse. Si
sólo nos centramos en “tapar agujeros” y los factores de riesgo siguen
presentes, la enfermedad volverá a aparecer.
La caries dental es la enfermedad
infecciosa más extendida. Sí, se
trata de una infección producida por una serie de bacterias. Puede
transmitirse de padres a hijos, de ahí
la importancia de que las mujeres embarazadas cuiden su boca antes del
nacimiento de su hijo, y de no introducirse en la boca chupete, cucharas…. que
luego van a la boca del niño.
Además es una enfermedad INCURABLE. Es decir, una vez se inicia una caries en un diente,
este no se va a regenerar, lo único que podemos hacer es quitar la parte dañada
y sustituirla por materiales de restauración artificiales. Que jamás serán
igual que un diente sano y que a la larga acabarán fallando. Por eso es tan
importante la prevención. Y la mejor manera de llevarlo a cabo es desde la
infancia.
Conociendo los
factores de riesgo de la caries dental, tendremos las herramientas para
prevenirla al 100%. Sólo con el cepillado no es suficiente. Se debe examinar los
factores de riesgo de cada paciente de forma individualizada, y a partir de
aquí establecer unas medidas preventivas adecuadas e individualizadas.
Evidentemente, cuánto mayores sean los factores de riesgo presentes,
tendremos mayor necesidad de cuidados y deberemos ser más estrictos.
Factores de riesgo:
- Por supuesto que hay una predisposición
genética, como con cualquier otra enfermedad. Pero no por ello dejemos de
cuidarnos, al contrario, deberemos extremar las medidas preventivas.
La caries es una ENFERMEDAD MULTIFACTORIAL. Es decir, se debe a factores genéticos y
ambientales. La genética no la podemos cambiar, pero el resto de factores sí.
- Alimentación :
No le damos la importancia suficiente y quizá
sea el factor más importante a la hora de evitar su aparición.
Los papas asocian la caries sólo a las
chucherías, y existen muchos más alimentos que son altamente cariogénicos. Si no modificamos nuestra dieta y adquirimos
hábitos saludables, las caries van a seguir. Además los niños pican muchísimo
entre horas y esto genera un ambiente ideal para la aparición de la enfermedad.
- Higiene :
No
se trata sólo de cepillarse, hay que hacerlo de manera correcta. Existen
reveladores de placa que son muy útiles para aprender una técnica correcta. Los
hay en pastillas, enjuagues… que tiñen la placa bacteriana de color y así se
hace visible para darnos cuenta de donde se acumula y como eliminarla. Si lo
probáramos nos daríamos grandes sorpresas de cómo nos cepillamos.
En el caso de los niños es de gran utilidad.
Hay mamas que dicen: cómo
es posible que mi hijo tenga caries si se cepilla 2 veces al día? Si se cepilla él solo, ten por seguro que no
lo habrá hecho bien. Se debe cepillar a los niños más pequeños, y a los mayores
bajo supervisión.
A parte del cepillado es muy importante el
uso de la seda dental, tanto en niños como en adultos. El cepillo no llega a
las zonas interdentales y es necesario el uso de la seda. Que por cierto usamos muy poco y sobre todo
los niños. Existen en el mercado flossers que son muy útiles para facilitar su
uso.
En algunas ocasiones, será necesario el uso
de flúor y otros agentes bactericidas, bacteriostáticos o remineralizantes
según el caso.
- Defectos de estructura del esmalte:
Esto es un tema a parte que ya expliqué en
otro post. Realmente es cada vez más frecuente y un serio problema. Muy
importante diagnosticar a los niños afectados cuanto antes, pues pueden llegar
a producirse grandes destrucciones dentales.
- Anatomía dental:
Hay que valorar las fisuras de los molares
nada más erupcionen. Existen diferentes tipos de fisuras. Hay fisuras anchas y
amplias accesibles al cepillado dental. Estos dientes serán menos propensos a
las caries. Pero también hay dientes con fisuras profundasy estrechas, donde se
acumula mucha placa basteriana y es imposible cepillar. Es importante detectarlas nada más
hacen erupción los primeros molares permanentes hacia los 6 años. Tener en
cuenta que mientras están erupcionando y durante el primer año en boca, los
dientes son más susceptibles a las caries. Y si existe este problema, la única
manera de darse cuenta es en el dentista y estos niños pueden beneficiarse de
un sellador de fisuras.
El uso del sellador de fisuras está muy
difundido en nuestra sociedad. Pero en mi opinión muchas veces no se hace de
manera adecuada. No todos los niños van a necesitarlo y si se pone hay que
hacerlo con el molar recién erupcionado. Y luego seguir un control. Un sellado
no significa ya no tener caries como se tiende a creer. Muchas veces vemos
caries debajo de los sellados y por eso creo que deben ponerse con precaución.
Bien colocados y bajo control, son una
medida preventiva excelente.
- Posición dental:
Los
dientes apiñados o mal posicionados generan zonas poco accesibles al cepillado
y por tanto van a tener un mayor riesgo de sufrir caries.
- Existencia de restauraciones anteriores:
Cuantos más arreglos llevemos en la boca
más posibilidades tendremos de volver a tener caries. Porque las restauraciones
se desgastan, crean zonas retentivas, pueden fracturarse…. No existe mejor restauración
que tu propio diente sano e intacto.
- Presencia de caries dental:
No restaurar los dientes de leche porque
van a caerse, es un error. Una caries es un foco de infección, y puede extenderse
a los dientes permanentes que estén erupcionando en esos momentos.
- Otros factores:
Flujo
salival inadecuado, radioterapia y quimioterapia, ciertos medicamentos de uso
crónico….
Hay que hacer un estudio de la dieta, los hábitos higiénicos
y factores locales (hipoplasias, anatomía dental…), en todos los pacientes,
especialmente en los niños, e instaurar unas medidas preventivas adecuadas
según cada caso en particular.